Nuevas alícuotas
Con la entrada en vigencia del decreto, las alícuotas de retenciones quedaron fijadas de la siguiente manera:
- Carne vacuna y aviar: del 6,75% al 5%
- Maíz y sorgo: del 12% al 9,5%
- Girasol: del 7,5% al 5,5%
- Soja: del 33% al 26%
- Subproductos de soja: del 31% al 24,5%
Fundamentación oficial
La decisión se enmarca en una política que busca fomentar el crecimiento de la agroindustria, mejorar la competitividad internacional y consolidar la estabilidad macroeconómica. Según el texto del decreto, “esta gestión de gobierno entiende necesario continuar creando condiciones favorables para la producción y el comercio exterior, brindando certezas a los productores, elaboradores y exportadores de las distintas cadenas de valor”.
Asimismo, el Ejecutivo considera a los derechos de exportación como “un impuesto distorsivo” que debe ser eliminado progresivamente, en la medida en que lo permita el equilibrio fiscal. En ese sentido, la administración Milei destacó que esta política busca alinear al país con los principios de libertad económica y apertura comercial, con el fin de dinamizar las cadenas productivas y fortalecer las economías regionales.
Impacto en las exportaciones
El Gobierno también justificó la medida con datos sobre el comportamiento reciente del comercio exterior agroindustrial. En los fundamentos del decreto se resalta que las reducciones previas de retenciones aplicadas a ciertas economías regionales y productos lácteos y porcinos generaron resultados positivos.
Durante 2024, los volúmenes exportados de productos agroindustriales crecieron un 56%, mientras que los valores aumentaron un 26%. Al mes de junio de 2025, el volumen exportado de trigo subió un 29%, el de girasol un 26% y el de maíz y aceite de soja un 4%, según datos oficiales.
Objetivos a futuro
El Gobierno reiteró su compromiso de profundizar la reducción de retenciones en el marco de una estrategia integral para impulsar las exportaciones, atraer inversiones y generar empleo. Además, anticipó que se continuará trabajando en medidas complementarias como la simplificación de trámites, la apertura de mercados y la reducción de cargas impositivas, con el objetivo de potenciar el desarrollo del campo y la agroindustria en todo el país.