La ceremonia se desarrolló al pie del monumento que recuerda a los marinos fallecidos y comenzó con la entonación del Himno Nacional Argentino, interpretado por la Banda de Música del Área Naval Atlántica.
El comandante de la Fuerza de Submarinos, capitán de navío Pablo Manuel Gabriel Garay, dirigió un mensaje alusivo en homenaje a los 44 tripulantes. “Su ejemplo es una brújula que aún nos orienta. Nos muestra el valor del sacrificio, del trabajo en equipo, de la lealtad y de la entrega silenciosa. Ellos supieron transformar el esfuerzo en honor, y ese legado es hoy sustento y guía para quienes seguimos sus pasos. En este día también abrazamos, con todo nuestro respeto, a sus familias, que sostienen con admirable fortaleza la ausencia”.
Posteriormente, citado por el diario La Capital, agregó: “Hoy los recordamos con orgullo. El dolor persiste, sí, pero también la gratitud. Gratitud por su entrega, por su valor, por haber representado lo mejor de nuestra Armada y de nuestra Patria. Que sus nombres sigan resonando en el mar y en nuestro corazón. Que el ARA San Juan y sus 44 guardianes permanezcan para siempre como faro y enseñanza. Porque su ejemplo nos inspira a ser mejores, a servir con honor y mantener viva la llama que ellos encendieron. Hoy y siempre, siga su estela iluminando nuestra derrota”.
Tras la invocación religiosa del capellán castrense David Ochoa, se colocaron ofrendas florales en nombre de la Armada Argentina y de la Asociación de Suboficiales Submarinistas Argentinos. Luego se efectuó el toque de silencio en memoria de los tripulantes, y la ceremonia concluyó con la interpretación de la Marcha de la Armada, según consignó La Capital.
La desaparición del ARA San Juan
El submarino ARA San Juan perdió contacto a las 7.19 del 15 de noviembre de 2017, ocho horas después de que su jefe de operaciones informara sobre un principio de incendio en el tanque de baterías número 3, presuntamente provocado por el ingreso de agua a través del sistema de ventilación mientras navegaba en medio de un fuerte temporal. La unidad se encontraba en una patrulla de control marítimo destinada a detectar pesqueros ilegales en la zona.
El anuncio del hallazgo se produjo en los primeros minutos del sábado 17 de noviembre de 2018, dos días después del primer aniversario de la desaparición, mientras decenas de familiares permanecían en Mar del Plata tras participar de un acto de homenaje. El casco del buque, clase TR-1700 y de 66 metros de eslora, fue localizado a más de 900 metros de profundidad sobre el lecho marino, completamente deformado e implosionado, a 460 kilómetros al este de las costas de Chubut. La búsqueda se extendió durante un año y contó con la colaboración de marinas de cerca de 20 países.
Los restos fueron hallados por el buque noruego Seabed Constructor, perteneciente a la firma estadounidense Ocean Infinity, contratada por el Gobierno nacional para continuar la búsqueda con tecnología capaz de operar en profundidades de hasta 6.000 metros. La localización se produjo en un área cercana al punto del último contacto y al sitio donde la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares había reportado un “evento anómalo, singular, corto, violento y no nuclear”, compatible con una explosión.
El homenaje
El acto de este sábado fue encabezado por el jefe del Estado Mayor General de la Armada, almirante Carlos María Allievi. Participaron el intendente Guillermo Montenegro; el subjefe del Estado Mayor General de la Armada, vicealmirante Marcelo Ricardo Flamini; el comandante del Área Naval Atlántica y jefe de la Base Naval Mar del Plata, contralmirante Marcelo Paternostro; y el comandante de la Fuerza de Submarinos, capitán Garay.
También asistieron autoridades de las Fuerzas Armadas y de Seguridad, representantes de distintos destinos de la Zona Naval, asociaciones de Veteranos de la Guerra de Malvinas, la Asociación de Suboficiales Submarinistas Argentinos, familiares de los 44 tripulantes y entidades del ámbito local.
Fuente: Diarios Bonaerenses

