Los trabajos estuvieron a cargo del personal del área, bajo la coordinación de la subsecretaria Soledad Vivio, y respondieron a la necesidad de recuperar este espacio simbólico para la comunidad deportiva local.
Cabe recordar que el monolito ha sido objeto de reiterados actos de vandalismo, una problemática que se espera no vuelva a repetirse. Desde el área municipal se destacó la importancia de cuidar los espacios públicos, ya que forman parte del patrimonio común y son utilizados diariamente por quienes practican actividades físicas o recreativas.
La restauración implicó una inversión de recursos y el esfuerzo de los trabajadores municipales, en el marco de una política sostenida de mejora y mantenimiento de los espacios deportivos.