La candidatura de Raverta se confirmó en la madrugada del domingo, tras intensas negociaciones internas dentro del peronismo que retrasaron la oficialización de las listas. Así, la ex titular de Anses se prepara para una nueva disputa con Montenegro, con quien ya protagonizó dos reñidas elecciones por la intendencia de Mar del Plata: en 2019, cuando perdió por menos de 10 mil votos, y en 2023, cuando la diferencia fue de aproximadamente 20 mil sufragios.
En esta ocasión, el escenario será la Legislatura bonaerense. Ambos buscarán representar a la quinta sección electoral en el Senado provincial, en un contexto político completamente distinto al de años anteriores y con una campaña aún por definirse en términos de estrategia y alianzas territoriales.
Montenegro celebró públicamente el acuerdo entre el PRO y La Libertad Avanza y, al anunciar su postulación, destacó: “La gente nos pidió la unidad antikirchnerista y estamos a la altura de las circunstancias”. En sus redes sociales, también escribió: “Estuve y estoy donde me lo demandan las circunstancias, donde más me necesiten y donde más pueda empujar con tal de que todos los que bancan delincuentes sean, por fin, destruidos”.
La contienda entre los dos marplatenses promete ser uno de los focos más relevantes de las elecciones del 7 de septiembre, en un tablero político reconfigurado y con nuevos desafíos tanto para el oficialismo local como para la oposición peronista.