Cabe señalar, que ya obtuvo la media sanción en Diputados y el objetivo ahora es que sea aprobada por la Cámara Alta el próximo miércoles 23 de junio para que de esta manera sea formalizada la ley.
A nivel local se espera con expectativas la definición de la Cámara Alta, ya que se estima que se vería beneficiada el 70% de la población.
Esto implicaría un 30% de rebaja en la tarifa a usuarios residenciales, mientras que, para aquellos en situación de vulnerabilidad, aquellos que perciben AUH, monotributistas con ingresos menores a cuatro salarios vitales y móviles, jubilados, personal doméstico y ex combatientes, entre otros, sería el 50% de reducción en las facturas.
“Esperamos se haga efectivo para los consumos de julio y agosto. Además, se agrega como beneficiarios a entidades de bien público, asociaciones civiles y comedores comunitarios debidamente inscriptos”, dijo a LA CAPITAL, el director de la OMIC local, Pablo Otamendi.
“Por supuesto que la letra chica de cómo se llevaría a cabo el beneficio en los usuarios de gas envasados devendría de una reglamentación de la Secretaría de Energía dependiente del Ministerio de Economía. En el caso del gas natural y gas propano diluido como Mechongué, vendría un concepto en la factura donde se determinaría la rebaja”, agregó el funcionario.
En caso de lograr la aprobación final, esta ley establece un plazo de 10 años de vigencia con respecto a esta reducción tarifaria que actualmente sólo percibe la Patagonia y que se extendería a la Provincia de Buenos Aires junto a otras zonas cordilleranas.
Audiencias públicas
Durante marzo pasado, Otamendi, en representación de la Oficina de Información al Consumidor, intervino de las audiencias públicas convocadas por la Secretaría de Energía de la Nación en donde el municipio dejó en claro su postura para que se declare a General Alvarado como “Zona Fría”, lo que permitiría aplicar una tarifa diferencial por el promedio climático anual en este distrito.
Los fundamentos fueron expresados claramente y argumentados de acuerdo a la franja de temperatura que prevalece desde mediados de marzo hasta noviembre aproximadamente.
“Se hace imposible para muchos mantener el servicio debido a la compleja situación económica y eso provoca que se acumulen deudas impagables o determinen los cortes del servicio por parte de la empresa”, expuso el titular de la OMIC.
