Con relación a lo conocido anoche, aseguró que “es algo que nadie quiere, pero lamentablemente lo tenemos que estar sobrellevando”.
Explicó que el jueves pasado, ante la aparición de un caso positivo de un empleado, se procedió a realizar un pool tester, que se efectúa en instituciones cerradas, como los geriátricos. Así fue como recordó que se recibieron ayer 47 resultados de residentes y personal, de los cuales 29 fueron positivos. Tres de esos casos se encontraban internados en el nosocomio local.
En atención a las conductas adoptadas, detalló que de la visita de anoche junto al doctor Islas, se motivó la internación de una persona, mientras que hoy se evaluaban otras cuatro. Con respecto a los empleados positivos, se aclaró que se encuentran en sus domicilios particulares, mientras que los negativos se presentaron a trabajar. “Separamos a los casos positivos de los negativos dentro del mismo edificio, por lo que esta mañana fuimos con la Jefa del Departamento de Enfermería para brindar una capacitación en cuanto a la atención que se debe brindar”.
Monitoreo
“Estamos preocupados por la situación, porque debemos ser conscientes que si los abuelos empeoran y requieren internación estaríamos con una ocupación del ciento por ciento de las camas, lo cual no deja de ser grave. Debemos monitorear de cerca a las personas y hay riesgo que el hospital se vea superado en su capacidad”, enfatizó. No obstante, aclaró que la mayoría de las personas adultas se encontraban en buenas condiciones.
Ante la consulta de los medios, Dojas manifestó que en la sala Covid-19 del único efector de salud del distrito, “tenemos seis casos positivos internados y tres casos sospechosos, a la espera de los resultados, de una capacidad máxima de dieciocho camas; estamos con una cincuenta o sesenta por ciento de ocupación”. En tanto, en la Unidad de Terapia Intensiva hay cuatro internados, aunque ninguno de ellos sin la necesidad de contar con asistencia mecánica respiratoria.
En otro orden, habló del porcentaje del personal de salud que está aislado por ser caso sospechoso, contacto estrecho o por cursar la enfermedad en el sistema sanitario: “Tenemos 140 enfermeros, de los cuales trabajan 75. Algunos por ser positivos, otros por contactos estrechos y otros por ser personal de alto riesgo que tuvieron que ser apartados por la Ley de Emergencia. Hoy Balcarce está trabajando con el 50% de su personal de Enfermería”, remarcó.
