Los vehículos retenidos fueron identificados por poseer caños de escape modificados, lo que no solo infringe la regulación actual, sino que también genera un impacto negativo en la calidad de vida de los vecinos debido al aumento del ruido y las emisiones contaminantes.
El municipio reitera su compromiso con la seguridad vial y el bienestar de la comunidad, instando a todos los propietarios de motovehículos a cumplir con los procedimientos establecidos. Se recuerda que la modificación de los sistemas de escape no solo es ilegal, sino que también puede acarrear severas sanciones.