La confirmación del incremento llega apenas unas semanas después del último aumento aplicado a principios de noviembre, cuando se levantó el congelamiento de precios acordado con el Gobierno, y en medio de la transición política que atraviesa la Argentina.
En aquel entonces, la nafta súper de YPF en la Ciudad de Buenos Aires ascendió a $272, mientras que el gasoil súper alcanzó los $292. Sin embargo, la compañía aún no ha proporcionado cifras oficiales sobre cuánto costará cada combustible después de este nuevo ajuste.
El aumento, además, tiene su impacto propio en las estaciones de servicio de Balcarce, donde el valor de los combustibles suele ser más elevado que en Capital Federal. Así, este sábado, los carteles ya actualizados de algunas YPF informan que el litro de nafta súper se vende a $381, el de nafta Infinia a $475, infinia diesel 578 y GNC $219 el metro cúbico.
A su vez, la suba se aplica en un contexto de escasez de combustible que ha afectado a todo el país en las últimas semanas, generando preocupación entre los conductores y empresarios que dependen del transporte para sus actividades diarias.
