Entre los aspectos más sobresalientes, las autoridades policiales resaltaron que han recibido equipamiento y patrulleros en las últimas horas que permiten contar con una estructura más apta para la prevención del delito rural, pero a su vez remarcaron la constante necesidad de colaboración por parte de los productores en advertir y denunciar los hechos que sucedan.
En la actualidad, uno de los mayores problemas que los mantiene alerta es el accionar de los “galgueros”: sujetos que salen a la caza de liebres por los caminos y campos, con perros galgos, y mayormente sin ninguna autorización o provocando otros ilícitos. Para eso, informaron, se disponen controles vehiculares constantes, secuestro de presas y armas, entre otros operativos.
Se destacó ante la MAB que el CPR y el municipio están trabajando en conjunto para instalar cámaras de seguridad que se deberán integrar al Centro de Monitoreo local, fundamentalmente en los accesos por caminos rurales que tiene la ciudad.
En materia de equipamiento y recursos, Lugo y Cerezuela remarcaron que el CPR tiene su base en Centenario y 55, y tres puestos: Napaleofú, Ramos Otero y San Agustín. Son 49 efectivos en total, todos cuentan chaleco antibalas; hay en funciones 7 móviles -entre ellos los nuevos entregados por la Provincia hace semanas- y se cuenta con un moderno equipo de comunicaciones con cobertura eficiente.
No obstante, entre los temas más reiterados, las autoridades policiales insistieron en la necesidad de que los productores y vecinos del área rural concreten las denuncias de los hechos delictivos que acontezcan. Sin la denuncia, alertaron, les resulta imposible actuar en concreto y llevar a cabo tareas investigativas o de mayor prevención. A propósito, se recuerda el contacto del CPR local: (02266) 42-0947.
Tanto desde las entidades agropecuarias de la MAB como desde el CPR, se arribó a un compromiso de colaboración y contacto permanente para trabajar en función de una mejor seguridad en el campo.
