De no tener en condiciones el pase sanitario que así lo acredite, no estarán habilitados a cumplir con sus funciones habituales al respecto y van a ser reubicados.
Dijo Kreplak: “Las personas que atienden al público en lugares cerrados deben tener al menos dos dosis. Si esto no es así deben reasignarles tareas para que no estén al frente de la atención al público”.
Así mismo, el ministro de Salud bonaerenese sostuvo en la conferencia de prensa que de no ser posible reubicar a trabajadores con atención al público que no tengan el pase tendrán que realizarse una prueba PCR todas las semanas.
Kreplak ha manifestado que desde la entrada en vigor del pase sanitario en Provincia el pasado 21 de diciembre se inspeccionaron unos 260 locales gastronómicos, recreativos, bancos e instituciones públicas.