A través de un escrito presentado ante el citado magistrado, Carrreras peticionó que "se tenga por acreditada la reticencia y la incomparecencia injustificada del reo Macri" y que, ante ello, "se haga efectiva la orden de detención prevista en el artículo 288 del Código Procesal Penal".
En su presentación, la letrada exige que "se tenga presente la falta de cumplimiento de los dichos de la tercera ajena a la causa Patricia Bullrich" y también se advierta "la línea de tiempo que marca una conducta dilatoria en el imputado".
"La querella que represento sólo quiere que se haga lo correcto", añade el escrito en el que señala que si el expresidente no es detenido se estará "frente a una nueva ofensa no sólo a los familiares sino al pueblo argentino todo, que no pide cárcel ni sangre, sólo pide justicia".
Según la abogada, "el imputado Macri, fue notificado, fue beneficiado con la primer prorroga y nueva fecha, utilizó los plazos al límite para estirar el trámite de la causa, que a pesar de las declaraciones públicas propias como las de su defensor, no realizó ninguna presentación espontánea para dar señales de su voluntad de ponerse a derecho, de su voluntad de cumplir con sus obligaciones". La referencia de la querella es porque Macri inicialmente fue citado el 7 de octubre pero estaba fuera del país y se postergó dicha convocatoria por ese motivo.