En una conferencia de prensa ofrecida en el Salón Dorado de la Gobernación, en La Plata, Kicillof dijo que propondrá que la "distancia admisible" entre los alumnos sea de 90 centímetros, algo que posibilitaría que más niños, niñas y adolescentes acudan a las aulas.
En el caso de las escuelas que, por motivos edilicios, no pudieran garantizar esa distancia, el gobierno bonaerense sugerirá que se fijen “medidas especiales de cuidado”, como el incremento de los controles y los testeos.
“Con esta propuesta vamos a estar muy cerca de la presencialidad plena”, dijo Kicillof a la prensa.
Además del distanciamiento, el gobernador resaltó que las medidas de higiene personal, ventilación y el uso de tapaboca para todos los docentes y los alumnos seguirán siendo obligatorios.