“Pasaron 5 días y todavía sigo sin poder creer estar pasando por esto. Lo que pasó en la madrugada del lunes me partió al medio, anímica y físicamente. Como consecuencia de las patadas recibidas en la columna, tengo 2 vértebras lumbares fracturadas. El traumatólogo me dijo que voy a tener que ser muy paciente porque pueden llegar a tardar meses en sanar y dejar de provocarme dolor. Pienso en lo que pasó y no encuentro explicación”, señaló Cabrelli.
La víctima, tras la golpiza añadió, “estar así me perjudica muchísimo laboralmente, ya que pierdo la posibilidad de hacer el curso de oficiales subayudantes al cual fui convocado y además quedo fuera de otra actividad laboral que realizo para la cual necesito estar bien físicamente, ya que soy árbitro de fútbol”.
Por último expresó: “soy una persona activa, me gusta hacer deporte y estar siempre haciendo algo, pero ahora, por hacer lo que correspondía, estoy así. Y lo peor de todo es tener que pensar que podría haber sido peor y tener que ´agradecer´ de no haber quedado paralítico… o que esté vivo”, finalizó Cabrelli.
