Ocurrió en una casa de calle 15 entre 4 y 6 donde se domicilia Rosa Blanco de Castaño, de 87 años, quien resultó ser víctima de los embaucadores.
Según narraron vecinos del lugar, de acuerdo a lo que les manifestar la damnificada, dos sujetos, uno joven y otro de mediana edad se personaron en el domicilio diciendo ser empleados de la Cooperativa de Electricidad que debían verificar el funcionamiento de la instalación eléctrica en el interior de la casa porque se había detectado una falla.
La mujer permitió que los desconocidos ingresaran y éstos comenzaron a mirar por distintos lugares hasta que en un momento le pidieron que tuviese apretada una perilla para poder controlar, solicitándole que “por seguridad” ante una posible descarga no tuviese encima objetos de metal, lo que hizo que dejase sus joyas en un lugar próximo, mientras los “operarios” controlaban distintos sectores de la casa.
Pasado un tiempo prudencial, al notar que estas personas no daban indicios de estar en la casa soltó la perilla que estaba teniendo y fue entonces cuando se dio cuenta que había sido víctima de un engaño y que había sido despojada de dinero y joyas por los malvivientes que por entonces ya se habían dado a la fuga.
Tras alertar sobre lo sucedido, quienes arribaron al lugar detectaron que la mujer tenía un pico de presión, por lo que fue trasladada de inmediato al Hospital para su atención.
Mientras tanto arribaron al lugar móviles de la Sub DDI y de la Policía Comunal que comenzaron a< trabajar en procura de esclarecer el caso.
Un dato curioso aportado por la víctima fue que minutos antes de la llegada de estos estafadores, había recibido la visita de un joven ofreciendo bolsas de residuos, lo que tras lo ocurrido hizo sospechar de que se podía tratar de un cómplice que “marcaba” el lugar que se presentaba como campo propicio para ser abordado.
