Otra despensa asaltada

El ilícito ocurrió en un comercio de calle 11, entre 20 y 22. La víctima fue una joven de 20 años, a la que despojaron del dinero en efectivo que estaba guardado en la caja registradora. Actuaron dos sujetos con sus rostros cubiertos.

Una joven de veinte años que se encontraba atendiendo el comercio propiedad de su familia, fue asaltada por dos individuos que actuaron con sus rostros cubiertos con capuchas. En cuestión de segundos se apoderaron del dinero en efectivo que estaba en la caja registradora y se dieron a la fuga con rumbo desconocido.

El ilícito -otro más que bajo esta modalidad se produce en los últimos días en nuestra ciudad- fue perpetrado en la despensa “Arbolito Tres”, ubicada en la calle 11, entre 20 y 22, propiedad de María Rosa Nicci
.

Los delincuentes calcularon cada uno de sus movimientos. Anteayer, según relató María Rosa a El Diario, se demoró unos minutos en llegar al local “porque siempre somos dos atendiendo. Esta vez estaba mi hija sola”.

Esa situación fue muy bien aprovechada por el peligroso dúo que, al observar que se retiraban clientes, ingresó imprevistamente al comercio alrededor de las 19. Uno de ellos, empuñando un arma de fuego, amenazó de muerte a la joven.

“Dame la plata, dame la plata. Era lo único que querían y le exigían a mi hija. Uno de los asaltantes se quedó junto a ella apuntándole con el arma de fuego y el restante se digirió hacia la parte trasera del comercio”, expresó.

La joven no ofreció resistencia alguna ante los delincuentes. Presa del miedo, accedió al desesperado pedido y le entregó todo el dinero que había en la caja registradora. No conforme con ello, quien la mantenía amenazada pasó por detrás del mostrador y se aseguró de que le había entregado la totalidad de la plata.

La aparición en escena de una motocicleta con dos personas que se detuvo frente al comercio obligó a los asaltantes a emprender la retirada. Todo indicaría que escaparon a bordo de sendas bicicletas.

“Mi hija vivió una situación terrible, muy triste”, expresó María Rosa, quien recordó que anteriores oportunidades, cuando tenía el comercio en la zona de calles 26 y 7, había sufrido seis robos.

Preocupada por la situación, la comerciante reconoció que “es difícil trabajar con miedo. Por eso me gustaría reunirme con el Intendente para charlar sobre esta cuestión y saber qué recaudos debemos tomar para protegernos”.

La Estación de Policía Comunal tomó intervención en este hecho delictivo, que se suma a otro de similares características que sufrió el comerciante Roberto Salvador en la noche del sábado en la calle 9, entre 30 y avenida Suipacha.
Artículo Anterior Artículo Siguiente
Informese Primero - El Diario Digital de Balcarce