Pasadas las 22 del domingo un desconocido, encapuchado, ingresó por un ventiluz del baño a la vivienda sorprendiendo a Rendino y amenazándolo con un cuchillo que tomó de la cocina exigiéndole dinero. Tras atarlo a una silla y sin ejercer violencia física el malviviente comenzó a revisar la vivienda, lo que motivó que el propio Rendino le dijese dónde hallar la plata, lo que permitió al ladrón alzarse con una considerable suma de dinero. Logrado su objetivo, el desconocido se tomó el tiempo necesario para sacar alimentos de la heladera y comer en el lugar, dándose luego a la fuga.
Cuando el octogenario logró zafar de sus ataduras pidió auxilio a un vecino quien alertó a familiares de Rendino y a la Policía.
