Los dirigidos por Fernández-Madarieta demostraron coraje, temple e inteligencia táctica para imponerse ante el poderoso SMATA, en su propia cancha y en un clima hostil tanto dentro como fuera del campo de juego.
Ferro dominó el inicio del partido, logrando una amplia ventaja que le permitió jugar con mayor soltura. Sin embargo, la lesión de su jugador principal —que obligó a detener el juego hasta la llegada de una ambulancia— fue un punto de inflexión que benefició al conjunto marplatense, permitiéndole reorganizarse y acortar distancias en el marcador.
El final fue muy disputado, pero el aporte clave de los jugadores balcarceños que ingresaron desde el banco terminó inclinando la balanza a favor del equipo de “La Estación”, que se quedó con el triunfo por 60 a 56.
