Estas acciones son fundamentales, teniendo en cuenta las modificaciones en los patrones de precipitaciones que se han registrado en los últimos años, con lluvias intensas en cortos períodos de tiempo, lo que genera acumulación de agua en ciertas áreas de la ciudad.
El nuevo sistema de drenaje permitirá una mejor circulación de las aguas, evitando posibles anegamientos y mejorando la calidad de vida de los vecinos de la zona.
Desde la dependencia se continúa trabajando para garantizar una ciudad más segura y preparada ante las condiciones climáticas cambiantes.