Este jueves, los profesionales realizaron simulacros tanto en entornos acuáticos como en terrenos montañosos, destacando la versatilidad y preparación necesaria para intervenir en diversas situaciones de emergencia.
En la sección de rescates acuáticos, se llevaron a cabo prácticas de buceo y rescate utilizando diferentes embarcaciones, replicando escenarios realistas para mejorar la capacidad de respuesta en situaciones de emergencia en cuerpos de agua.
Por otro lado, las operaciones en la sierra incluyeron ejercicios de rescate en altura y en condiciones desafiantes, imitando los terrenos accidentados que caracterizan a la región de “La Brava”. Estos simulacros no solo resaltaron la destreza técnica de los rescatistas sino también su capacidad para adaptarse a entornos complejos.
La elección de “La Brava” como escenario de entrenamiento subraya la importancia de prepararse para intervenir en áreas de difícil acceso, comunes en la provincia. Este tipo de prácticas contribuye significativamente al fortalecimiento de las habilidades de los rescatistas, asegurando respuestas rápidas y eficientes en situaciones de emergencia.
