En principio, según se confió a LA CAPITAL, sólo permanece habilitado desde hace unos días el sector de tragamonedas con un aforo máximo de 116 personas, aunque por una cuestión de ubicación y distanciamiento se pusieron en funcionamiento de momento unas 106 máquinas.
Durante diciembre funcionará en el horario de 14 a 3, mientras que sigue en estudio lo que ocurrirá a partir de enero del 2021.
Luego de tantos meses sin actividad y de incertidumbre lógica con respecto a las habilitaciones de Provincia para la reapertura, se dispuso que los empleados cumplan un sistema de “burbuja”, salvo aquellos con patologías preexistentes o que por “edad de riesgo” permanecerán en sus hogares por precaución.
De acuerdo al protocolo que se informó a este diario, aquellos empleados que estén cuando se autorice el juego en el sector de ruleta, punto y banca o black jack llevarán tapabocas y máscaras. Paralelamente, se aplicarán turnos mediante un sala de espera y también existe un solo sentido único de circulación donde las personas deben pasar de a una sin acompañantes – salvo que ocupe otro lugar de juego – y se prohíbe la circulación, con la excepción que sea de una máquina a otra.
