El hecho es investigado por el fiscal Rodolfo Moure, quien una vez que recibió las denuncias de las menores y corroboró la veracidad de los dichos, dispuso la inmediata detención del hombre, a quien imputó por dos casos de “abuso sexual” y dos de “abuso sexual gravemente ultrajante“.
El primero de los hechos denunciados por las víctimas se registró en 2013, cuando la joven tenía 14 años -hoy tiene 19-. Según el testimonio, la adolescente estaba en la casa de su tía, en Balcarce, cuando en circunstancias en que quedó a solas con su tío -pareja de su tía- el hombre, en contra de la voluntad de la víctima, comenzó a manosearla, primero el cuello y la cara y luego la tocó por dentro de la ropa.
Años después, en 2016, el hombre habría abusado de otra de sus sobrinas, cuando la adolescente tenía 15 años. En esa ocasión, adolescente fue llevada por el sujeto hasta una habitación y, fuera de la vista de otras personas, la manoseó.
Ese mismo año ocurrieron los hechos más graves y deleznables. En circunstancias que son materia de investigación, mientras la adolescente estaba de visita en la casa de su tía, el hombre volvió a llevarla a un cuarto y, esta vez, le sacó la ropa a la menor, le bajó los pantalones, la penetró con los dedos e intentó violarla, pero no pudo concretar el acto ya que justo la hija del hombre se despertó e interrumpió.
Días después, según consta en la denuncia, el hombre volvió a arrinconar a su sobrina en un cuarto de la vivienda, en donde la manoseó, le exhibió su pene y le pidió que lo tocara.
Luego de esta situación, la menor aseguró que su tío le dijo que “no contara nada” a su madre, porque si no la mujer se iba a enojar y la iba a golpear.
Se espera que en las próximas horas el hombre declare ante el fiscal Moure, quien además consideró como “agravantes” en los hechos que la menor se estaba en la casa de su tía, ámbito donde se encontraba a resguardo y en confianza por la relación que la unía con ella. También la duración de los abusos ya que fueron perpetrados en más de una ocasión.
