El represor tuvo a su cargo al menos 21 centros clandestinos de detención y fue condenado en 4 ocasiones a la pena de reclusión perpetua. La Justicia lo halló responsable de numerosos secuestros, torturas, desaparición forzada de personas y apropiación de menor.
El cuestionado beneficio le fue otorgado por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 6. Le autorizó a residir en el Nuevo Boulevard del Bosque, entre Guaraníes y Tobas, Bosque Peralta Ramos de la vecina ciudad.
De los 2.971 represores imputados desde 2006 por crímenes aberrantes, 1.064 se encuentran detenidos: 533 se encuentran con arresto domiciliario y 531 con arresto en dependencias del Servicio Penitenciario Federal o de otra fuerza.
La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos emitió un Comunicado en el que, entre otros conceptos, señala: “ El beneficio domiciliario a un criminal de este calibre, marca el grado de retroceso en las políticas de derechos humanos, evidenciada también en la represión ordenada por el gobierno nacional ante cada movilización popular de Sur a Norte de nuestro país. Es el mismo paradigma que violenta la doctrina de derechos humanos, tan arduamente consagrada en el plexo jurídico internacional y nacional, que hoy vemos avasallada y vulnerada en los tres poderes del Estado “.
