El fuerte viento que se abatió durante la jornada del domingo provocó que algunas chapas ubicadas en lo alto del edificio cedieran. Como consecuencia de ello, se produjeron filtraciones en un sector y el agua comenzó a bajar hacia el sector de butacas y el escenario.
Debido a la pendiente en el suelo provocó que al menos se aglomeraran dos metros de agua al frente del escenario y alcanzando a tres filas de butacas.