Vale destacar que teniendo en cuenta que no existe el espacio físico necesario para su extracción directa se deberá proceder a su desarme por partes para liberar el lugar.
Se producirá una especie de desguace de la vieja caldera debido a sus dimensiones y luego recién se comenzará la colocación de la nueva. Se estima que para los primeros días de diciembre el procedimiento estará cumplido y ahí se estará poniendo a disposición la nueva herramienta de calefacción de la sala.